En un principio encaminé mi formación hacia la técnica y las ciencias, no obstante, los avatares de la vida me llevaron al estudio del derecho. Sin duda esto me ha llevado como jurista a la comprensión con facilitad de litigios técnicos, de litigios de patentes.

En 1989 me colegié y comencé a ejercer como abogada en Sevilla, al tiempo que prestaba servicios para una de las grandes Agencias de Propiedad Industrial, consolidando en esta experiencia mi firme apuesta y especialización en propiedad industrial e intelectual. En 2003 y tras superar el examen de capacitación regulado en la Ley de Patentes para el ejercicio de la actividad de Agente de la Propiedad Industrial, fundé mi propia empresa, ya con el distintivo PATENTING®.

Como Agente de la Propiedad Industrial y Agente Europeo de Marcas y Diseños estoy acreditada directamente ante la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM, Madrid), la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO, Alicante) y la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI, Ginebra).

Como Letrada en ejercicio, más de 30 años ya en la abogacía especializada dan para mucho. Granada, Alicante, Madrid, Valencia, Bilbao, Santa Cruz de Tenerife, mi Sevilla natal, y otras tantas competencias me han visto con la toga en sus Juzgados y Tribunales, y en las empresas, sentada durante horas junto a los empresarios, resolviendo y ayudando a resolver.

He asistido y conocido las grandes reformas legales que se han producido en esta materia tan específica de nuestro derecho mercantil, siempre aprendiendo, pensando en los problemas de nuestros clientes y procurándoles soluciones basadas en la excelencia, el rigor y la construcción eficiente de sus estrategias de protección de activos; así como la defensa de sus derechos y posiciones cuando surgen los conflictos. En el ejercicio de la Abogacía, el conocimiento debe quedar cimentado y enriquecido con la experiencia, y también con la perspectiva.

Tengo el honor y la responsabilidad de ejercer el derecho de la propiedad intelectual, que incluye la industrial y materia conexas, desde la doble perspectiva: la del Agente de la propiedad industrial, siempre más preventiva, constructiva y perteneciente al terreno de lo administrativo y extrajudicial; y la de Abogada en ejercicio, asumiendo defensa de mis clientes, llegado el conflicto o litigio, acompañándolos en lances que no siempre les son cómodos, velando por sus intereses en estas materias tan específicas y especializadas, y tan relevantes desde el punto de vista económico.

Ejerzo la abogacía que siempre quise: una forma de atención personalizada honesta, clara, basada en la lealtad, el esfuerzo y el rigor técnico, a un nivel muy exigente y experto de especialización. Es en casos como estos donde los clientes experimentan las ventajas de contar con un compañero de viaje que conoce muy bien el camino.

En ocasiones, otros abogados y asesores me confían sus asuntos más complejos y especializados en la materia. También redacto informes en materia de infracción, falsificaciones, etc, para empresas y procesos judiciales.